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Trastorno disocial: síntomas y causas

Introducción

Para vivir en sociedad es necesario respetar un conjunto de normas básicas que aseguran una convivencia respetuosa y sana con los demás. Sin embargo, las personas con trastorno de conducta violan esta congruencia con comportamientos egoístas e insensibles. Se asocia principalmente a la agresividad en niños y niñas, ya que suele aparecer durante la infancia. A continuación, profundizaremos en las posibles causas de esta enfermedad.

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¿Qué es el trastorno de conducta?

Según la última edición del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), el trastorno por déficit de atención se define como un cambio típico de la adolescencia, a lo largo de la infancia. Los afectados sufren principalmente ataques de ira a otras personas o incluso animales, que también afectan a otros aspectos de su vida como el rendimiento escolar o las relaciones. También tienen bajos niveles de empatía o afecto por los demás. Actúan sin pensar mucho en las consecuencias de sus actos, son impulsivos, tienen conductas peligrosas y tienen poca tolerancia a la frustración.

Causas de los trastornos del comportamiento

Como han confirmado los estudios, existen varias causas posibles del trastorno de conducta:

Factores sociales y psicológicos

Psicológica y socialmente, se ha observado que muchos de estos niños abandonan sus hogares donde hay problemas de conducta y son marginados. Esto significa que los niños que crecen en familias o entornos donde estos problemas están presentes y son comunes, tienen más probabilidades de desarrollar este tipo de trastorno. Otra causa del trastorno de oposición está directamente relacionada con el tipo de crianza que reciben los niños o adolescentes a edades tempranas. Si se les enseña de forma autoritaria o, por el contrario, aumenta la tendencia a desarrollar este trastorno. Por ello, es muy importante llevar a cabo una educación equilibrada manteniendo un entorno familiar favorable.

Factores biológicos

Aunque parezca poco probable, los genes también juegan un papel importante en esto. La falta de responsabilidad, honestidad, madurez o empatía puede deberse a un factor biológico en sus genes. El desarrollo del lóbulo frontal también tiene una relación importante, ya que es responsable de los procesos cognitivos. Es responsable de planificar, elegir y tomar decisiones conscientes y voluntarias sobre el comportamiento y sus consecuencias. Por tanto, la malformación o desarrollo del lóbulo frontal puede estar directamente relacionada con este tipo de trastorno.

Diagnóstico de trastorno de conducta

Los médicos basan su diagnóstico de trastorno de conducta en el comportamiento del niño. Los síntomas y el comportamiento deben ser lo suficientemente problemáticos como para afectar el desempeño en las relaciones personales, en la escuela o en el trabajo. También se tiene en cuenta el entorno social. Si el mal comportamiento se desarrolla como una adaptación al ambiente estresante (como áreas devastadas por la guerra o áreas de conflicto civil), entonces el comportamiento no se considera un trastorno del comportamiento. Los médicos también tratan de identificar cualquier otro problema de salud mental o de aprendizaje que pueda tener el niño.

Tratamiento de trastornos de conducta

Llevar a cabo el tratamiento del trastorno de conducta es un desafío porque los niños y adolescentes con trastorno de conducta rara vez se dan cuenta de que algo anda mal con su comportamiento. Por lo tanto, regañarlos e instarlos a que se porten mejor no es útil y debe evitarse. A menudo, el tratamiento más eficaz para niños o adolescentes con trastornos graves es sacarlos del entorno problemático y proporcionarles un entorno estructurado, como el hogar, la intermedia o el correccional. La psicoterapia puede mejorar la autoestima y el autocontrol de los niños, permitiéndoles controlar mejor su comportamiento. Se tratan otros trastornos que puedan surgir. Algunos medicamentos pueden tener algún efecto, especialmente si el trastorno de conducta coexiste con otros trastornos como el TDAH o la depresión. El tratamiento de estos trastornos concurrentes ayuda a reducir los síntomas del trastorno de conducta. El tratamiento más eficaz para las dificultades de aprendizaje.

Síntomas principales

Como se mencionó anteriormente, el trastorno de conducta se caracteriza por un comportamiento muy agresivo, por lo que los principales síntomas que se presentan son:

  • Nulo sentido de culpabilidad.
  • Mentiras recurrentes.
  • Abuso, agresiones o crueldad.
  • Egoísta e irresponsable.
  • Temperamento arrogante y con aires de superioridad.
  • Manipulador y amenazantes.
  • Interpretan las reacciones de otras personas como peligro.
  • Son crueles con los animales e indiferentes a la molestia de los demás.
  • Pelean a menudo.

Como resultado de este trastorno, algunos niños o adolescentes pueden desarrollar otros tipos de trastornos, como depresión, hiperactividad o falta de atención.

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