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Especialidad Clínica de Medicina Preventiva y Salud Pública

Medicina preventiva y salud pública

La medicina preventiva y salud pública es la especialidad médica delegada de ejercer, impulsar y averiguar ocupaciones y políticas de promoción y defensa de la salud; además de la vigilancia de la salud poblacional, de la identificación de sus necesidades sanitarias y de la planeación, administración y evaluación de los servicios sanitarios. Su objetivo es minimizar la posibilidad de la aparición de la patología, o impedir o mantener el control de su progresión. Está conformada por 5 superficies expertas concretas: la epidemiología, la gestión sanitaria, la medicina preventiva, la salud ambiental, gremial, y la promoción de la salud.​

La medicina preventiva es la zona de la Salud Pública delegada de conceptualizar, impulsar, llevar a cabo, utilizar y evaluar esas ocupaciones de prevención realizadas a partir de las instituciones asistenciales en lo que se refiere a individuos colectivos o equipos de peligro integrados dentro de actuación de dichas instituciones.​ Sin embargo, el término de medicina clínica preventiva comprende "cada una de las ocupaciones preventivas de los servicios de salud pública que inciden sobre la persona, tanto si se hacen sobre en una base personal como colectiva".

Campos de acción

La salud pública es la ciencia de defender e impulsar la salud de las sociedades por medio de la enseñanza para la salud, la promoción de la salud y la prevención de patologías y heridas, encierra un área más vasta que la medicina preventiva propiamente esa, que se abarca en las 5 zonas de esta especialidad médica.​

Administración sanitaria

La gestión sanitaria es el sector de entendimiento y acción que se encarga de las maneras de financiación, organización, administración, manejo y evaluación del sector sanitario, destinados a ayudar a mejorar la salud de los individuos y poblaciones.​ Se realiza en los diversos niveles del sistema de salud y comprende las ocupaciones en relación con la preparación de planes de salud, la dirección y administración asistencial, así como la evaluación de servicios y programas y la administración de la calidad asistencial.

Epidemiología

La epidemiología explica y explica la dinámica de la salud de las poblaciones, identifica los recursos que la conforman, y comprende las fuerzas que la gobiernan, para intervenir en el curso de su desarrollo natural.​ Para llevar a cabo con su cometido, la epidemiología investiga el reparto, frecuencia y determinantes de las condiciones de salud en las poblaciones humanas, así como las posibilidades y el efecto de las respuestas sociosanitarias instauradas para atenderlas. Incluye tanto la vigilancia de la salud como el control de brotes epidémicos y situaciones de emergencia sanitaria, el desarrollo de programas de averiguación en salud pública y la preparación de sistemas de información e indicadores.

Promoción de la salud

Se llama Promoción de la Salud al proceso que permite que los individuos maximicen el control y la optimización de su salud.​ Este proceso va más allá de comportamientos particulares, debido a que involucra intervenciones sociales y del medio ambiente.​ La promoción de la salud incluye el diseño y la administración de políticas públicas saludables, el refuerzo de la acción y la colaboración comunitaria, el desarrollo de la enseñanza para la salud y la reorientación de los servicios sanitarios.

En 1986 se hace en Ottawa, Canadá, la Primera Conferencia Mundial para la Promoción de la Salud, elaborándose un archivo nombrado La Carta de Ottawa para la Promoción de la Salud.​ En noviembre de 2016, se llevó adelante en Shanghái, la 9.ª Conferencia Mundial de Promoción de la Salud. Este acontecimiento ha sido organizado conjuntamente por la OMS (OMS) y la Comisión Nacional de Salud y Organización Familiar de la República Exitosa China. A lo largo de la Conferencia se ha aprobado El testimonio de Shanghái sobre la Promoción de la Salud.

Salud ambiental y laboral

En salud ambiental y laboral incluye el desarrollo y evaluación de programas de custodia de la salud ante peligros ambientales​ y laborales a partir de una visión de la población,​ destacando de forma particular los involucrados con la limpieza y estabilidad alimentaria.

Formación de especialistas

La formación de especialistas en medicina preventiva y salud pública en España se hace por medio del sistema de Doctor Interno Residente (MIR). Hay una gigantesca diferencia entre la formación en diferentes territorios. Para comenzar, ciertos territorios no poseen una especialidad de Salud Pública. De entre las naciones que poseen, en el Reino Unificado no hace falta ser doctor para entrar a la especialidad, lo que es una diferencia fundamental. Otra fundamental diferencia es que en territorios como Reino Unificado, Irlanda, territorios balcánicos o territorios Bajos la rama de Medicina Preventiva Hospitalaria la hacen otras especialidades (por ejemplo, en Reino Unificado los microbiólogos), mientras tanto que en España tiene un gran peso en el proyecto formativo y en las competencias de la especialidad. Generalmente, las competencias y las responsabilidades de especialistas de Salud Pública varían bastante de un territorio a otro, lo que es problemático en un entorno donde la movilidad gremial en Territorios de Europa crece, y donde la especialidad no está homologada en una gran parte del conjunto de naciones.

Motivos para la elección de la especialidad

Aun cuando es una asignatura que invariablemente pertenece a la formación de los licenciados en medicina, la mayor parte elige preferentemente otras posibilidades anterior a embarcarse en la medicina preventiva.

  • Vocacional.
  • La futilidad de tratar pacientes de uno en uno una vez que los primordiales inconvenientes atañen a toda la sociedad.
  • Hallar la probabilidad de combinar sus intereses en las esferas social y política con la práctica médica.
  • La pluralidad de oportunidades y estímulos intelectuales.
  • Resulta en especial llamativa la capacidad para intervenir en la prevención de las patologías.

Motivos por los cuales no hacer otras especialidades:

  • Requiere mucha implicación en inconvenientes particulares como la psiquiatría.
  • Tratar con pacientes terminales, como la oncología.
  • Centrarse en curar más que en prevenir la enfermedad, como la cirugía.
  • Trabajar en medicina privada, cuyo campo es bastante estrecho y simple comparado con la pluralidad de la salud pública.

Aspectos de mayor interés de la especialidad

  • La especialidad es muy amplia, con lo que es difícil precisar demasiado, pero podemos destacar el diseño, desarrollo y evaluación de programas de prevención y promoción y los diseños y estudios epidemiológicos.
  • La variedad y el desafío intelectual son los motivos de mayor disfrute: Cada día abre nuevos retos, desde abrir una nueva oficina de planificación familiar, construir nuevo centro de salud, localizar recursos y distribuirlos, etc.
  •  La sensación de que mi trabajo mejora la vida de los demás.
  • La posibilidad de ajustar mi horario libremente.
  • Pensar, pensar y pensar.

Aspectos menos valorados de la especialidad

  • El papeleo de rutina y los choques con la burocracia son los más citados, con el peligro de que se convierta en una actividad de despacho.
  • La tendencia de sustituir expertos de la salud con administradores.
  • El bajo grado de apoyo a partir de las instituciones públicas y la sociedad generalmente, y la carencia de estatus en la sociedad médica.
  • El hecho de estar considerado por el público como un burócrata en lugar de un doctor, provoca que sea blanco de toda clase de críticas, la mayoría sin motivo. Esto no es un inconveniente si el programa es puramente sanitario, como el control de patologías, sin embargo, si es un programa de salud pública, es bastante factible que seas el blanco de la prensa y equipos de presión.​

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